Para Haydelena, por ser el motivo de mi trajinar.
Conduzco a tus brazos
Cansados, postergados
Conduzco en posición de aburrimiento
El que me tiene aquí horas
Esperando llegar
Siento que no avanzo
Mientras el granizo cae en mi cabeza
Y el aire polvoriento
No ayuda a mejorar
La incomodidad de avanzar
Entre pueblos y lagunas que no puedo ver
Hacen del tedio mi pensamiento
Que no provoca ir más allá
Avanzo con las riendas atadas a mi hocico
Las que me detienen sin pedir permiso
Yo ya quiero llegar
Pero tiran, tiran
Es hora de descansar
¿Cuánto vamos ya?
Que se me hacen eternas
Las pisadas de acero
Que relinchan al cabalgar
Mi muslo es la comodidad
Del de arriba
Que con poncho y sombrero
Se cree más todavía
No siento la carga
Es la costumbre de mis ancestros
Que me heredaron
La forma como tengo que vivir
Nadie me ha pedido por favor
A lo mucho me han dicho:
Fuerte, de lindo pelaje
Y ya se subieron
Con la montura otra vez
Al fin la cuesta
De ahí viene el valle
Y a subir de nuevo
Quién dijo que ya se terminó
Nada me obliga a seguir
Más látigos no son novedad
De mi lomo adormecido
Sólo levantan pellejo y suciedad
Tampoco es por la comida
Que más quisiera yo morir
Pero en el charco de lodo
No encuentro más que piojos
Ya de bajada
Chocan crujir mis huesos
Se hace tarde
Y por fin me veo llegar
Se desmontan
Me jalan al establo
Y me conduzco a ti
A tus brazos que no me pueden abrazar
Pero siempre sueño
Que tus patas me abrazan
Me dan calor
Por qué rendirme
Si galopo por tu amor
...